Restauración de la vegetación de la ribera
Para acompañar al arroyo en los primeros pasos de recuperación de su vegetación riparia, se estaquillará y plantará en la zona acotada a la fauna silvestre. Se trata de ayudar al sistema en su primera fase de autorrecuperación.
En el entorno de las hidrotecnias puede producirse una competencia inicial notable con plantas heliófilas y ruderales, en algunas áreas ahora solo cubiertas por especies poco palatables. En estos enclaves y en las zonas más próximas al cauce se introducirán estaquillas para que el sombreado controle la extensión inicial de las oportunistas.
Complementariamente, en las zonas más alejadas del arroyo, se apoyará la recuperación del sotobosque propio de la zona mediante la plantación de matorrales, arbustos y árboles de especies autóctonas propias de la zona.
No se considera conveniente realizar plantaciones excesivamente densas a lo largo del arroyo, por cuanto esto puede contravenir la idea general de aportar dinamismo reduciendo la incisión y erosión en los lechos y márgenes. Con la finalidad de aportar mayor naturalidad, se plantará por bosquetes irregulares de vegetación que favorezcan la regeneración natural.
Por lo tanto, se establecen tres bandas de repoblaciones según su distancia al cauce:
– Repoblaciones de orilla de cauce (1ª Banda).
Se estaquillará esta banda con las especies autóctonas Salix salviifolia y Salix atrocinerea.
– Repoblaciones de las llanuras de inundación (2ª Banda).
Se plantará con las siguientes especies autóctonas Salix salviifolia, Salix atrocinerea, Fraxinus angustifolia, Populus nigra, Populus alba, Sambucus nigra, Rosa canina, Rubus ulmifolius, Crataegus monogyna.
– Repoblaciones de zonas más alejadas de la lámina del agua (3ª Banda).
Se plantará con las siguientes especies autóctonas Quercus ilex subsp. Ballota, Retama sphaerocarpa, Juniperus oxycedrus, Acer monspesulanum y Arbutus unedo.